Calles de fuego, fábula del rock and roll (así se vendía) dirigida en 1984 por Walter Hill es una de mis petardadas favoritas. Porque la película es mala con ganas, y sin embargo, no sé si porque esta película remueve algo de nostalgia de infancia ochentera, siempre me agrada volver a visitarla, aunque no resista el mínimo análisis crítico y provoque sonrojos continuos con sus tópicos y sus personajes de cartón.
Continuar leyendo «La tienda de los horrores – Calles de fuego»