– ¿Tiene usted alguna experiencia como raptor?
– Pues claro. ¿Sabe lo que hago cuando rapto a alguien? Primero le llamo por teléfono y luego le mando a mi chófer.
– Ah, tiene usted chófer. ¿Qué marca de coche tiene?
– No tengo coche, sólo tengo chófer.
– A lo mejor es una tontería pero, si tiene chófer, ¿no sería lo normal tener coche?
– Ya tuve uno, pero sale demasiado caro tener coche y chófer, así que vendí el coche.
– Pues ya ve si soy ingenuo: yo hubiera conservado el coche y hubiera vendido al chófer.
– Eso es imposible. El chófer tiene que llevarme al trabajo por las mañanas.
– Pero si no tiene coche, ¿cómo le lleva al trabajo?
– No tiene que llevarme al trabajo. Estoy en paro.
– Escúcheme, voy a proponerle una cosa. ¿Cuánto quiere por hacer de blanco en un tiro al blanco?
Horse feathers. Norman Z. McLeod (1932).