C.C. BAXTER: Ya sabes, vivo como Robinson Crusoe, náufrago entre ocho millones de personas. Entonces, un día vi una huella en la arena, y allí estabas… Es algo maravilloso, ¡¡cena para dos!!
The apartment. (Billy Wilder, 1960).
Reflexiones desde un rollo de celuloide
Hola, Alfredo, buenos días; y es que da exactamente igual: en ese cofre, metes la mano, y, saques lo que saques, siempre es un tesoro…
Un abrazo y buena semana.
Decía Borau que para él era el mejor guión de la historia del cine. Estoy de acuerdo.
Abrazos.
¡Me gusta tanto esta película de Billy Wilder!
¡Me gusta tanto Jack Lemonn!
… Todos buscamos una huella en la arena…
Besos
Hildy
Es verdad, y además, en el curro, siempre esperamos a viernes…
Besos
Cómo te gusta esta peli, maño… A mí también, eh, que conste…
Pues sí, rediez. Aprovechando la foto puedo decir que me gusta más que comer con los dedos…
El viejo zorro ataca de nuevo. Sí señor, el gran viejo zorro. En el centro comercial hay doce salas de cine… y hoy me he puesto a escribir sobre viejos amores cinematográficos…
Abrazos
Pues sí, amigo, el viejo zorro nunca descansa. Como Keaton, como Groucho, como Allen, necesitamos sus miradas para aguantar mejor la mierda que nos rodea. Con un par… de ojos, sí señor.
Abrazos
Brutal!! Ya no se encuentras sentencias como esa en el cine actual, tienes que buscar un montón para hallar una perla como ésa.
Así es, Vir. En el cine de hoy se habla muchísimo, pero decir, lo que es decir, se dice muy poco. Economía de medios: máxima expresión con el mínimo de palabras. Hoy vivimos justamente lo contrario. Y, además, entre efectos digitales para despistarnos y que confundamos la creación con la recreación.