… además de su belleza y cabellera pelirroja, además de ser una de las reinas del Technicolor… tenía otro plus… Era una heroína que caía bien…, simpática, fresca, divertida, inteligente…, una buena compañera y rival. Mira, que me voy a dar una vuelta con mi amiga por Innisfree…
Sobre todo inteligente, creo yo, además de todas esas otras cosas. Y tierna, y sensible… Cómo lloraba todavía, hace apenas unos pocos años, recordando a John Ford. Que ya es llorar…
Besos
John Wayne abre la puerta de golpe. Estaba hasta lo cojones de ir de bueno por la vida y no paraban de pincharle todos aquellos pueblerinos borrachuzos. John no podía soportar por más tiempo la mezquindad y los prejuicios de aquel país húmedo, verdoso y con niebla. Da rienda suelta a sus puños y le va dando de hostias al tocacojones de turno a lo largo de un paisaje que no vemos. Estamos con John y John abre la puerta de golpe, como Heathcliff en sus cumbres borrascosas, pero una vez abierta la puerta, nosotros ya estamos dentro. Una fuerte ráfaga de viento acompaña a John, que no es otra cosa que su deseo sexual. Ese viento desmelena la hermosa cabellera roja e irlandesa de Mauren O’ Hara. Estaba escrito en el viento. Débil es la carne y De ilusiones también se vive. El cine, claro, era todo eso y más.
D. E. P.
Ya no hay pelirrojas como las de antes…
… además de su belleza y cabellera pelirroja, además de ser una de las reinas del Technicolor… tenía otro plus… Era una heroína que caía bien…, simpática, fresca, divertida, inteligente…, una buena compañera y rival. Mira, que me voy a dar una vuelta con mi amiga por Innisfree…
Beso
Hildy
Sobre todo inteligente, creo yo, además de todas esas otras cosas. Y tierna, y sensible… Cómo lloraba todavía, hace apenas unos pocos años, recordando a John Ford. Que ya es llorar…
Besos
John Wayne abre la puerta de golpe. Estaba hasta lo cojones de ir de bueno por la vida y no paraban de pincharle todos aquellos pueblerinos borrachuzos. John no podía soportar por más tiempo la mezquindad y los prejuicios de aquel país húmedo, verdoso y con niebla. Da rienda suelta a sus puños y le va dando de hostias al tocacojones de turno a lo largo de un paisaje que no vemos. Estamos con John y John abre la puerta de golpe, como Heathcliff en sus cumbres borrascosas, pero una vez abierta la puerta, nosotros ya estamos dentro. Una fuerte ráfaga de viento acompaña a John, que no es otra cosa que su deseo sexual. Ese viento desmelena la hermosa cabellera roja e irlandesa de Mauren O’ Hara. Estaba escrito en el viento. Débil es la carne y De ilusiones también se vive. El cine, claro, era todo eso y más.
Abrazos
Ay, amigo, el cine… Esa nostalgia, esa memoria sentimental, también se va poco a poco con ellos. No hay sucesores.
Abrazos
¡guau! ¿todavía vivía?…nunca lo hubiera dicho. Voy corriendo a ver qué fue de su hermosura en una foto actual (ya sabes, la fascinación por la ruina…)
Pues lo tienes fácil: recibió un Óscar honorífico hace poco. En fin…