2 comentarios sobre “Billy Wilder, un hombre perfecto al 60%”
-Paco, ¿crees en dios?
-Claro. Se llama Billy Wilder, no te jode.
El viejo zorro es tan genial que ya su vida como periodista en Viena era diferente al resto de los mortales. Bailarín, gigoló, brillante, carismático, lenguaraz, cínico, tierno, inteligente como el demonio, fumador como los hombres de antaño (ahora van subidos en sus mountain bike con culotes muy ceñidos marcando los huevecillos, y cascos a lo Alien), bebedor, putero… quiso hacerle una entrevista a Sigmund Freud y cuando este tipo estirado con barba digno todavía del XIX, se enteró quién era el tipo que quería entrevistarlo dijo que ¡NOOOOOO! rotundamente. Vaya mierda de neurólogo. Sigo. Fascinante, encantador, gran conversador, gran periodista, gran guionista, gran director… joder, tío, hoy ya no es capaz un espermatozoide y un óvulo crear tipos así, como mucho mierdecillas que se van al Decathlon para comprarse una mountain bike, culotes, cascos a lo Alien… y recoger las bolitas con un guante de plástico de su mierdecilla chihuahua…
Ay, Paco, con lo necesitado de risas que ando este lunes… Lo de Freud lo cuenta precisamente en este documental, y con muchísima gracia. Me gusta ver cómo, a la manera en que coescribía sus guiones, se levanta para contar la historia, no para quieto… ¡Y cómo dramatiza esos momentos el cachondo…!
-Paco, ¿crees en dios?
-Claro. Se llama Billy Wilder, no te jode.
El viejo zorro es tan genial que ya su vida como periodista en Viena era diferente al resto de los mortales. Bailarín, gigoló, brillante, carismático, lenguaraz, cínico, tierno, inteligente como el demonio, fumador como los hombres de antaño (ahora van subidos en sus mountain bike con culotes muy ceñidos marcando los huevecillos, y cascos a lo Alien), bebedor, putero… quiso hacerle una entrevista a Sigmund Freud y cuando este tipo estirado con barba digno todavía del XIX, se enteró quién era el tipo que quería entrevistarlo dijo que ¡NOOOOOO! rotundamente. Vaya mierda de neurólogo. Sigo. Fascinante, encantador, gran conversador, gran periodista, gran guionista, gran director… joder, tío, hoy ya no es capaz un espermatozoide y un óvulo crear tipos así, como mucho mierdecillas que se van al Decathlon para comprarse una mountain bike, culotes, cascos a lo Alien… y recoger las bolitas con un guante de plástico de su mierdecilla chihuahua…
Abrazos, amigo.
Ay, Paco, con lo necesitado de risas que ando este lunes… Lo de Freud lo cuenta precisamente en este documental, y con muchísima gracia. Me gusta ver cómo, a la manera en que coescribía sus guiones, se levanta para contar la historia, no para quieto… ¡Y cómo dramatiza esos momentos el cachondo…!
En fin, ya no hay machotes como los de antes…
Abrazos