Muy a menudo, la comedia romántica de enredo funciona como metáfora de un tema intocable para el Hollywood de la época dorada: la lucha de clases. Esto sucede en todas las screwball comedies que emparejan a una joven y rica heredera con alguien pobre y pusilánime. Uno de los mejores ejemplos, aunque ni mucho menos el único, es esta estupenda y divertidísima comedia de Howard Hawks, uno de los grandes maestros del género (y de los géneros, en realidad).
Me consta que me repito como el ajo, y lo he dicho varias veces. Pero con esta película atesoro uno de los recuerdos de mi infancia. En el cuarto de estar, toda la familia, sin ausencias, unos en los sillones, otros en el suelo, riéndonos a carcajadas frente La fiera de mi niña. Y yo, por eso, entre otros motivos, amo esta película.
Beso
Hildy
Ese es el mejor motivo, mi querida Hildy. Las grandes películas siempre hablan de uno o le hablan a uno.
Besos
Muy buenas!
Juro que estaba viendo el clip y me venia a la cabeza una escena similar a la que ha comentado Hildy. Creo que si a los buenos recuerdos le sumamos que es una estupenda película entonces ya figurara para siempre en nuestro top particular.
Saludos!
Solo la música puede tener un efecto más evocador que el cine compartido.
Saludos.