Segunda entrega de la sección de cine en el programa La Torre de Babel, de Aragón Radio, la radio pública de Aragón, dedicada a los más grandes cómicos del cine mudo: Mack Sennet, los Keystone Cops y la productora Essanay, Max Linder, Ben Turpin, Charles Chaplin, Harry Landgon, Harold Lloyd, Buster Keaton, Stan Laurel y Oliver Hardy…
(desde el minuto 15)
A mí también me gusto “Stan & Ollie”. Menudos papelones los de Steve Coogan y John C. Reilly. El de Reilly ejemplar. Cabe mencionar la película de Richard Attenborough de 1992 “Chaplin”, con Robert Downey Jr. y Gerardine Chaplin. Creo que es un poco presuntuosa y carece de profundidad. El guion de William Goldman es bueno pero el viejo Attenborough estaba dominado por las superproducciones y eso afectó a su película. El maravilloso documental de Peter Bogdanovich “The Great Buster”, de 2018 es también ejemplar. No sé si has leído la autobiografía de Buster Keaton “Slapstick”. Está contada con inocencia casi infantil, encantadora, luminosa, es decir, que retrata muy bien aquella época de conquista por un arte que empezaba a nacer. Eso es, precisamente, de lo que carece la película de Attenborough. Es curioso que el cine mudo sea el peor documentado de su historia.
No sé si hoy se atreverían a realizar una película muda, aunque no sea precisamente cómica. Creo que sería un gran reto para un director que se precie contar una historia a base de imágenes y silencios. Creo que esto Wong Kar-wai lo hace muy bien. Si nos ponemos a pensar un poco nuestra vida está basada de dolorosos silencios y verborreas innecesarias. No veo yo mucho en el cine lo primero y sí demasiadas veces lo segundo. Hay un momento extraordinario en “Sunset Boulevard” del viejo zorro Billy, donde vemos a la Norma Desmond visitando el plató donde está rodando Cecil B. DeMille. De repente, es iluminada por un foco. Su rostro siniestro y amargado se transforma, desaparece el fantasma y se materializa una diosa resplandeciente. Un micrófono se desliza hacia su cara y ella lo aparta con desprecio. No se puede expresar mejor lo que representó la llegada del cine sonoro en tan breve tiempo y sin pronunciar una sola palabra. Hoy una escena así la actriz habría recitado una larga perorata en contra del cine sonoro.
Fíjate tú, viejo amigo que “El gran dictador” me entusiasma menos de lo que me entusiasmó hace ya unas décadas. “Candilejas” siempre me resultó demasiado lacrimógena y “Monsieur Verdoux” una película fallida. Sin embargo “La condesa de Hong Kong” que muchos la consideran una película desfasada yo siempre la consideré entre lo mejor de los años sesenta.
Acaba de estrenarse en el cine “El chico” de Chaplin y eso siempre se agradece. Por cierto, qué trágica la historia de Jackie Coogan el niño prodigio que ganó un millón de dólares y fue estafado por su madre y terminó sobreviviendo, haciendo el papel de Fétido Addams. Al fin y al cabo la vida es un slapstick.
Qué grande es el cine… bueno, qué grande fue.
Abrazos mil.
Me parece una gran película, sin aspavientos, al grano. Un pelín sentimental a ratos, pero se reconoce como homenaje y no se traiciona ni pretende ser más que los homenajeados. Es muy honesta, y además está muy bien hecha, con una puesta en escena perfecta y algún alarde (el plano secuencia inicial) realmente estimable. «Chaplin», en cambio, como bien dices, es un poco decepcionante por todo lo contrario. Quiere ser, ante todo, un producto de Hollywood.
La biografía de Keaton la descarté porque hace algún tiempo solo encontraba ejemplares a precios carísimos. No obstante, hace poco conseguí un ejemplar en muy buen estado y muy asesquible, así que ahí está, en la pila de pendientes (ya en la parte de arriba, de este año no pasa), y con muchas ganas. El documental de Bogdanovich me encantó, aunque sigo pensando que hay demasiadas «cabezas parlantes» que no pintan nada, opiniones de gente que está muy por debajo del nivel, no ya del de Buster o el de Bogdanovich en sus buenos tiempos, sino incluso para el de hoy.
Ya sabes en qué han acabado los intentos recientes de hacer películas mudas, ya sea «The Artist» o «Blancanieves» de Pablo Berger. Copian la estética, pero no el lenguaje, y claro, resultan películas sonoras sin sonido, no películas mudas. La diferencia me parece tan sutil como elocuente; en suma, ponen un letrero para explicar en lugar de mostrar. Eso no es cine mudo.
De Chaplin me gusta todo excepto «Candilejas», salvo fragmentos (como el de Buster, por ejemplo, pese a cómo quedó al final). Incluso me gusta «Un rey en Nueva York». Pero claro, hay grados. Su sentimentalismo nunca me atrapó, como no me atrapa el de Capra ni ninguno en general, pero en particular comparto tu aprecio por «La condesa de Hong Kong», que me parece históricamente infravalorada. «El chico» en pantalla grande es prodigiosa, más allá de que el 4K sea un timo, y en cuanto a Jackie Coogan, pobrecillo él, prefiero pensar que de todo puede salir algo bueno: gracias a su caso se estableció la primera legislación sobre el reconocimiento profesional y la gestión patrimonial de los intérpretes menores de edad.
Abrazos
Oye, ¡qué bien te explicas! Felicidades!
Sobre lo que comentáis, solo asomo la patita para defender Monsieur Verdoux, que no sé qué tiene -que le veo los defectos, eh- pero es como que me hipnotiza, y cuando la recuerdo necesito volver a verla una y otra vez. Mucho más me gusta que El Gran Dictador, desde luego. Y un recuerdo para Una mujer de Paris, que deja el aroma de lo que también podría haber hecho Chaplin si no hubiera seguido haciendo lo que tan bien sabía hacer,
Me apunto el libro de Keaton y sobre la peli de El gordo y el flaco, coincido con tu parecer. Me gustó mucho su sencillez y su ausencia de dramatismos y conflictos innecesarios, que fuera un tierno y simple homenaje. En el mismo sentido, aunque acaso sea peor película y al más inane -porque en el fondo no cuenta nada- me terminó gustando, aunque empezó no gustándome, Las estrellas no mueren en Liverpool, creo que se llama, que cuenta el rollo de Gloria Grahame con un joven inglés. Digo que me gustó al final precisamente por lo que dices, porque es un homenaje obvio, tierno y sentido, a la que fue una verdadera estrella.
Un saludo, supongo que habrá más colaboraciones que estaré encantado de escuchar.
A mí «Monsieur Verdoux» me gusta mucho, incluso con sus defectos. Chaplin explora quizá un tipo de humor más negro que no es propiamente el suyo, pero a mí me encaja (quizá porque sí es mi tipo de humor). El problema de «Una mujer de París», aparte del aire folletinesco, es que no era lo que la gente esperaba de él, y claro, renunció a explorar esa vía. Pero es una gran película. A mí «El Gran Dictador», solo ya por Jack Oakie, me parece fabulosa. Ahora está de moda, quizá, menospreciarla un poco, pero tiene momentos brillantes (y alguno de lo contrario también).
La película de la Grahame… No me terminó de convencer. Tampoco me pareció mala… Pero ni fu ni fa. Algo pasa con las películas en las que aparecen actores y actrices interpretando a su vez a otros actores y actrices famosos que me echa de la historia. Quizá porque tengo mucho más interiorizada a Gloria Grahame que a Anette Benning. La veo siempre a ella y nunca a la otra.
Llevo ya dos temporadas y pico de colaboraciones. Están disponibles en podcast, pero me parece que no son fáciles de encontrar porque no conservo las fechas y el nombre de los archivos no hace alusión al contenido. Y claro, no es cuestión de escucharse todo desde el principio a ver si cae el higo… En el blog hay muchas colgadas, eso sí. Si el podcast se mantiene, ahí estarán.
Saludos