Felices Fiestas, con las ratas de Las Vegas

En este año de celebraciones restringidas, nada mejor que buscar compañía en estos geniales golfos de Las Vegas. Un poco de acompañamiento extra para un tiempo que, este año más que nunca, debe ser optimista y servir de acopio de fuerzas y ánimos para lo que viene, que todavía va a ser necesariamente duro, sin olvidar a los que han sufrido y sufren y a los que se han marchado. En nuestra emoción y en nuestro recuerdo, siempre.

¡Feliz Navidad, a todos los escalones!

Feliz Navidad (2ª parte) – Todos dicen I love you

En la delicia musical Todos dicen I love you (1996), Woody Allen incluye un sentido homenaje a Groucho Marx, en particular a la escena precedente, perteneciente al principio de la magistral El conflicto de los Marx (Animal Crackers, 1930). Allen, que utiliza un fragmento de ese pasaje musical de Groucho (I must beeee goiiiiiiing…) para los créditos de Si la cosa funciona (2009), rinde así pleitesía a una de las razones que, según él mismo expone casi al final de su clásico Manhattan (1977), hacen que la vida valga la pena.

Y como no podemos estar más de acuerdo con el genio de Brooklyn, aprovechamos ese magnífico homenaje musical para desear a todos los escalones unos días muy felices en compañía de aquellas personas, animales y cosas que más quieren.

I love you, my steps… ¡FELIZ NAVIDAD!

Feliz Navidad (1ª parte) – Amanece que no es poco

Con nuestros «mejores» deseos para quienes inventaron la Navidad a la imagen y semejanza del volumen del buche que llevan llenándose gratis y sin dar un palo al agua desde hace dos mil años largos. Pero para eso está la fe… del que paga, claro.

With love.

Cortometraje – When humans are sleeping…

Hace más o menos un mes que los comercios dicen que es Navidad. Aquí va nuestra felicitación, un corto animado dirigido por Aaron Erimez, no precisamente destacable por su técnica ni por su resultado, pero simpático y con una banda sonora magnífica: Bizet, Tchaikovski, Offenbach y Rossini.

Nuestros mejores deseos para todos.

Mis escenas favoritas – Plácido

Nada mejor que una de entre las muchas escenas gloriosas de esta obra maestra de Luis García Berlanga para, por un lado, desearos a todos, creyentes y no creyentes, una Feliz Navidad, y también para reflexionar, creyentes y no creyentes, acerca de la hipocresía colectiva, el escaparatismo moral y el barniz artificioso de buenos sentimientos, marketing de encomiables propósitos y falsedad generalizada de estas fechas, que, afectándonos a todos en mayor o menos medida, alcanza cotas inigualables en fenómenos tales como telemaratones, subastas benéficas, eventos varios a beneficio de no se sabe quién… Todo aquello que Berlanga y Azcona, como siempre, consiguen sacar a la luz de la alfombra bajo la que lo escondemos para arrojárnoslo a la cara con una sonrisa y un buen pescozón.

Feliz Navidad a todos los escalones.