Música para una banda sonora vital: Casino Royale (John Huston, Kenneth Hughes, Val Guest, Robert Parrish, Joseph McGrath y Richard Talmadge, 1967)

Burt Bacharach, que hace unas semanas cumplió 90 años, compone la banda sonora de esta simpática aunque irregular parodia de los filmes de James Bond, de superpoblado e interesantísimo reparto: Peter Sellers, Ursula Andress, David Niven, Woody Allen, Orson Welles, Deborah Kerr, William Holden, Charles Boyer, Daliah Lavi, Jean-Paul Belmondo, George Raft, John Huston, Barbara Bouchet, Jacqueline Bisset, Peter O’Toole, David Prowse, Anjelica Huston, Geraldine Chaplin, Mireille Darc… Una de las bandas sonoras que contribuyeron a que Bacharach sea considerado uno de los más importantes compositores para cine de la década de los sesenta.

(tema principal)

(partitura completa)

Música para una banda sonora vital – Diana Krall

Diana Krall se hizo popular a nivel mundial con su versión del tema The look of love, compuesto por Hal David y Burt Bacharach y que, interpretado por Dusty Springfield, aparecía en la banda sonora de Casino Royale (1967), película apócrifa de James Bond, rocambolesco proyecto codirigido por John Huston, Kenneth Hughes, Val Guest, Robert Parrish y Joseph McGrath, y gracias al que un popular cómico neoyorquino llamado Woody Allen vio por vez primera un guión suyo trasladado a imágenes. En 2003, Krall hizo una breve aparición al piano en su película Todo lo demás.

Intriga en tiempos de guerra: La noche de los generales

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Varsovia, 1942. Tercer año de la ocupación alemana de Polonia. Un grito de horror rasga la noche en una modesta casa de huéspedes. En el silencio solemne que sigue el paso de la muerte, un vecino asciende furtivamente la escalera en dirección al piso de donde provenía el terrorífico lamento, pero al escuchar un ruido de pasos se esconde en el cuarto que sirve de aseo. Nervioso, comprende que lo que ha escuchado es el sonido del crimen, del asesinato, y adivina que quien desciende por la escalera es el asesino. Por una rendija logra ver parte del cuerpo del criminal, no así la cara. Lo que ve le deja estupefacto: un uniforme gris verdoso, botas relucientes y una franja roja en la pernera de los pantalones del uniforme que indica la presencia de un general de la Wehrmacht al que ya no tendrá ninguna curiosidad por identificar averiguando su rostro. No obstante, el mayor Grau, experto conocedor de su oficio, averigua pronto que solamente tres generales alemanes no cuentan con coartada para esa noche, y el descubrimiento del culpable se convertirá en una peligrosa obsesión que importuna a los altos mandos en medio de una crisis militar en plena retaguardia polaca, con lo que la investigación se verá amenazada por razones de oportunidad política y militar.

Esta coproducción francobritánica no desluce para nada en la comparación con cine norteamericano del mismo corte de mediados de los sesenta. Combinación de cine bélico, histórico, romance y suspense policiaco «cazapsicópatas», la cinta quizá sea vista hoy como un producto un tanto pretencioso, sobre todo por la cantidad de temas que pretende abarcar y el insatisfactorio tratamiento en el que deriva alguno de ellos, pero no se puede negar que Anatole Litvak se conduce con solvencia en esta historia con tantos puntos de interés que, si bien en algún momento parece perder el norte de lo que quiere contarnos, atrapa con su intriga bien manejada y con la apasionante narración de hechos históricos de la Segunda Guerra Mundial y los años siguientes como la represión en Polonia, el expolio cultural de Francia, la liberación de París por los aliados, la memoria colectiva europea en los años sucesivos al final de la guerra, el reciclaje de muchos nazis a la vida civil, los juegos de poder dentro del ejército o el atentado contra Hitler a cargo del general Von Stauffenberg, episodio que Bryan Singer y Tom Cruise revisitan en la inminente Walkyrie. Continuar leyendo «Intriga en tiempos de guerra: La noche de los generales»