Música para una banda sonora vital: Donnie Darko (Richard Kelly, 2001)

Donnie Darko (2001) es el único título estimable de la filmografía de Richard Kelly. Estrenada en muy pocas salas, y con un bajísimo rendimiento en taquilla, sin duda su incipiente carrera se vio truncada sin remedio. Fueron el alquiler doméstico y el boca-oreja los que han terminado por convertir su película en un moderno clásico de culto. Excepcional en muchos sentidos, tan imaginativa y fresca como osada y surrealista, con un finísimo sentido del humor, cuenta además con un magnífico catálogo de estupendas canciones que suenan a lo largo del metraje, entre ellas esta Under the Milky Way, de The Church.

7 comentarios sobre “Música para una banda sonora vital: Donnie Darko (Richard Kelly, 2001)

  1. Y todavía sigue la moda o nostalgia de los 80. Productos inferiores a Donnie Darko está Super 8, de Abrams o esa miniserie de seis capítulos Stranger Things de los hermanos Matt y Ross Duffler, que ha tenido tanto éxito que me parece que ya están rodando una segunda temporada. Siempre es lo mismo; niños en bici y diálogos forzados para que hagan gracia (nunca la tienen), luces cegadoras en el cielo y caras bobaliconas mirando a esas luces, papás que están pero que no están, pero que también son buenos, o el padre ausente (de Spielberg), guiñitos a Steven y Papadita Lucas, reminiscencias del mejor Stephen King (cuando se drogaba) de los 80 y gotitas de Carpenter, sobre todo de La Cosa. Hay que agitar bien todo esto y sale un cóctel de habitaciones de críos americanos (siempre muy desordenadas para dar la sensación de rebeldía) con pósters de las peliculitas que remataron al espectador para convertirlo de nuevo en un crío estúpido. Los 80 se cargaron la verdadera ciencia ficción y una manera de hacer cine, sobre todo esa de «con cuatro duros y mucho talento» por «presupuestos siderales en favor de los efectos especiales y contenido nulo». En fin, también entiendo todo esto. Vivimos en unos tiempos tan acotados que la misma aventura se ha hecho imposible: móviles, ordenadores, conservadurismo, prohibiciones y productores surgidos del mismísimo infierno. Una vez escribí que Los Goonies fue la última aventura posible en el cine. Marcó un antes y un después donde todavía tenía cabida las bicis, el poco control de los críos por parte de los padres, los mapas de piratas que se podían coger con las manos, y no imprimirlos a través de internet, las persecuciones de hampones gilipollas y esa amistad que hoy ha dejado de existir por falta de tiempo, espacio y menos miedo.

    ¡Felicidades, amigo mío! ¿Lo llevas bien? Yo cada vez que cumplo un año más es como una puñalada trapera.

    Que tenga un gran pero que gran finde.

    Fuerte abrazo.

    http://giphy.com/gifs/movie-comedy-home-video-Q56SF4czEtSZG

    1. Jajajaja… Muchas gracias, canalla… Me lo estoy tomando bastante bien, teniendo en cuenta que inauguro los 40 (41, concretamente). Desde luego, mucho mejor que no cumplirlos… El fin de semana se presenta lleno de actividades, por suerte, para darme un homenaje. No todas me apetecen igual, ni las compañías que llevan asociadas me motivan del mismo modo, pero no vamos a quejarnos a estas alturas.

      Creo que el análisis que haces sobre por qué a tanta gente le gusta recuperar estas cosas es acertadísimo. El autor pone unas notas que muevan a la nostalgia y al recuerdo personal, y el público hace el resto y rellena la historia. Es como esos tíos que se han forrado con los libros de «Yo fui a EGB».

      En fin, veo que a Lucas ya lo llamas Papadita, en diminutivo. Si es que el roce hace el cariño, ya tú sabes…

      Fuerte abrazo, amigo mío, y muchísimas gracias.

      1. Pues, una vez descubierta la canción, te invito a descubrir la película. Vale muuuucho la pena, y además contiene otras canciones igualmente estupendas que también pueden ser buenos descubrimientos. Mad world, por ejemplo. Porque The Killing Moon ya es bastante conocida, creo.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.