29 comentarios sobre “In memoriam – Alfredo Landa”
Adiós CRACK nos he hecho disfrutar en infinidad de películas. Me encanta la foto elegida en su despedida…El Crack que sigue viéndose con la nostalgia de los días pasados.
Para mí, tenía que ser esta foto, porque para mí Landa es, ante todo, Germán Areta. La metamorfosis de Landa entonces es, de alguna manera, la del país en aquel tiempo (aunque estos días se demuestre que no hemos pasado de oruga a crisálida, sino de gusano a gusano con alas que no vuelan).
Gracias, José María.
Bueno,otro más que se fue.Uno de los muchos actores que tuvieron que trabajar en los años del franquismo para comer y realizando horteradas a más
no poder. Garci supo sacarle buen provecho en la serie del Crak. Lo que me pasa a mí con este actor es que cuando lo veía en interpretaciones serias,como por ejemplo,Historias de un beso,no es muy creíble:como camina,su seriedad como escritor de renombre;no fue un José Luis López Vázquez,también pequeño,calvo y todo eso,pero mejor actor.No puedo imaginarme a Landa interpretando La prima Angélica o La cabina,¿no crees? No le veía como a un Fernando Delgado,Agustín González,Rafael Alonso,Manolito Alexandre,etc., no sé. De todas las maneras se nos fue uno de la familia.Digo de la familia para todos
a aquellos que crecimos con el cine español,con caspa o sin ella.
Un abrazo.
Uf, Paco, no estoy muy seguro de estar de acuerdo contigo. Te entiendo, su cambio no fue tan radical ni tan completo como los casos que citas, seguro. Los resquicios del pasado permanecieron más ligados a él que a cualquier otro actor de su generación, de entre los «tuneados» a los nuevos tiempos. Pero yo creo que es más culpa por las películas de Garci en las que sale ya mayor (la que citas o «Luz de domingo») que por él; de hecho, en una de ellas que a ti a mí nos encanta «Tiovivo c.1950», Landa está que se sale en la escena del teléfono. Pero, es verdad, de todos aquellos, en comparación, es el que más tiempo estuvo desaparecido, y si no hubiera sido por Garci, seguramente no habría habido metamorfosis de ningún tipo.
Abrazos
Yo entiendo sus matices, pero también veo su Sancho Panza, por ejemplo, su Germán Areta, y no veo a «Manolo la Nuit» en ellos. Afortunadamente.
En fin, qué pocos quedan… Lo peor de todo es que ya hay generaciones enteras que no saben quién es este señor, ni los de su época. La tragedia de este país siempre es el olvido.
Esto es increíble. Como decía aquella canción de Nacha Pop “una décima de segundo”. Vengo de ver a un colega, que ha tenido un pequeño accidente. Sin el móvil inteligente, ni conexión con el mundo exterior. Andando de vuelta a casa entre el zumbido de sirenas y el retorno de la gente en sus coches tras la jornada laboral. Entro en el blog y veo los enlaces. Perdona la expresión, Alfredo. Pero, ¡me cagüen la puta se ha muerto un pedazo de actor! D.E.P, abrazos
Pues fíjate que hasta ahora no recuerdo el personaje de Paco el bajo de «Los santos inocentes». Sólo por ese papel debo rectificar todo lo que he dicho antes en cuanto al reciclaje de Landa tras la era del desarrollismo. Y rectifico con mucho gusto.
De verdad que no es por llevar la contraria a Paco, faltaría más que un grumete se subiera a las barbas del patrón, pero es que en el caso de Landa, (otro Don Alfredo) no soy capaz de encontrarle un pero que lo haga inferior, ni en detalles, a cualquier otro de los mejores (esos en los que los tres estamos pensando) mejores actores patrios de todos los tiempos. Lo intento, por aquello de la relatividad, pero no lo consigo,
En cuanto a la interpretación de «Paco el bajo» es, en sí misma, una obra de arte mayúscula.
¡Como duele esto! Si sólo tenía 80 años, aunque para mí ya había muerto hace 5 años, en los que no sabía nada de él.
Precisamente el otro día, con la reposición de La Vaquilla, lo comentaba con mi madre ¿Cómo estará este hombre?
Ayer, Antena Aragón repuso una conversación que mantuvo con el bueno de Luis Alegre en 2008 en el gran programa «El reservado». Al principio, mientras contaba su vida, me pareció que sobreactuaba un poco casi como si estuviera declamando pero aún así, la bonhomía y franqueza que inspira y el hecho de que usara diminutivos como «puertica» o «papelico» consiguieron que dejara el retrato que yo esperaba de él. Fue una conversación muy amena y emocionante.
Se sabía que estaba muy flojo después de un ictus, y que además, en las conversaciones, a menudo se le iba la cabeza. Recientemente, hará un año o así, escuché un programa de radio que fueron a hacer a su casa algunos de sus amigos (Garci entre ellos); allí todavía estaba lúcido y distendido, Pero el deterioro ha debido ser bastante rápido. En fin, me gusta que resaltes eso de que era un gran conversador, porque, por lo que parece, era verdad. Claro, siempre y cuando no le tocaran aquello…
Yo lo entiendo de esta manera, Raúl: mientras Fernán-Gómez, Aleixandre, López Vázquez, González, Sacristán, etc., dieron el paso del cine franquista, digamos «frívolo» (con todos sus matices y excepciones), al cine «serio» (ídem) para quedarse como actores de referencia en el cine español de mejor calidad y mayor trascendencia (desde el segundo tercio de los setenta hasta entrados los noventa), en el caso de Landa se da más una convivencia que un cambio. Porque, sí, están Areta, Paco el bajo, Fendetestas, «Canción de cuna» y las demás de Garci, pero está también el brigada de «La vaquilla», «Biba la banda», «Al fin solos» y sus series de televisión. Y ahí no dejaba de ser el Landa de toda la vida. Esa, al parecer de Paco, creo, y en parte, del mío, porque en parte lo comprendo, es la diferencia. Es una tontería, porque eso habla de su versatilidad. Y también, la verdad, importa poco vista la admiración que despertó en Cannes en 1984 en un jurado que no le conocía y que se quedó absolutamente atónito con su personaje.
Para mi, como para muchos, un Grande del cine español. Si me apenó la muerte de José Luis López Vázquez o Tony Leblanc, la de Alfredo Landa la he sentido más. Era un símbolo. Descansa en paz, Germán.
Lo mío ha sido una opinión.Pero vuelvo para dejar constancia del aprecio que le tengo a Alfredo Landa.Aquí va un poema compuesto a base de los títulos de las películas que he visto y en orden cronológico.Este poema también se lo dedico a Raúl. Él y yo tenemos un espacio secreto que es como un cementerio de los grandes ilustres españoles.
Atracó a las tres
y se fue a la verbena de la Palona
y se dijo:Se vive una sola ve.
y las niñas se pusieron de luto;
él casi un caballero.
Luego llegaron los marcianos
con nobleza baturra:
Historias de la televisión,
whisky y vodka
como un señor de Murcia.
Ay,la ciudad no era para él,
hoy como ayer,
de nuevo en esta plaza,
de cuerpo presente y
amor a la española,
las cicatrices.
Landa,Landa,Landa,
un diablo bajo la almohada y somos de piedra:
La dinamita está servida:
una vez al año ser hippy no hace daño,qué carajo,
cateto a babor y un
guapo heredero busca esposa y
un pisito de solteras.
El reprimido;dormir y ligar todo es empezar,
fin de semana al desnudo y
mayordomo para todo y las verdes praderas
préstame a tu mujer, hijo que es
forja de amigos y me mete un crack
en la próxima estación. Se mete otra parte de crack,
y piernas cruzadas
y hay más santos inocentes y paraísos perdidos
Sinatra y el río que nos lleva. Aquí el que no corre
vuela.Menuda marrana,menuda vaquilla de la vida.
Landa,Landa,Landa
por fin solos.Historia de un beso.
El refugio del mal y la luz prodigiosa
y el oro de Moscú.Bandera negra.
La vida es un tiovivo una luz de domingo.
Subámos todos al Arca de Noé que esto se hunde.
Landa,Landa,ven a tripular con la bandera negra esta
barca aunque seas un cateto a babor.
Impresionante la vis lírica de Francisco.
Respecto a lo de si Alfredo Landa era un gran conversador, a mí me lo pareció aunque claro, Luis Alegre no le «tocó aquéllo» que dices. Aunque hubo un momento, cuando salió a relucir el deterioro de la relación con Garci que yo me dije «¡Ay, ay, que esto explota». Para nada. Aunque evidentemente todo está preparado me sorprendió que se tocara ese tema delicado.
Cuando has dicho que hará un año, un grupo de amigos, Garci entre ellos se reunió en su casa, de verdad que me he alegrado porque eso demuestra que las relaciones se arreglaron, lo cual era muy importante para Landa que decía que la amistad era fundamental en su vida.
Pues fue tal cual; en realidad querían invitarle al programa, pero como no podía salir ya de casa, fueron a grabarlo allí a una hora más normalita. Fue emocionante, aunque, por otro lado, un poco triste.
Me ha decepcionado un poco El Crack 2 en cuanto a la acción porque me quedé con ganas de una gran venganza por parte de Germán Areta y porque respecto a la 1ª parte baja en tensión. Por lo demás ¡fantástica! Hasta Arturo Fernández me gustó, y mira que me parece histriónico siempre que lo he visto! Por otro lado, aunque sólo sea por nostalgia de mi niñez, me gustan esas vistas de la ciudad tanto en la parte 1 como en la 2, pero yo creo que Garci abusa un bastante de ellas.
Está siendo completísimo el repaso que las teles están haciendo de toda la trayectoria de tu tocayo Landa. Se lo merece, sin duda y ¿sabes qué? ¡Que aún no puedo creerme que haya muerto!
Claro, es que es Germán Areta, no Harry Callahan… Entiendo lo que dices, es más contemplativa y reposada.
Madrid es a menudo, en las peliculas de Garci de aquella época, un personaje más, y contribuye, para mí, a que su cine de aquellos años siga siendo el mejor que ha hecho. Estaba pegado sociológicamente a la calle, al momento que vivía el país, y en eso la presencia de Madrid en la pantalla ayuda muchísimo. Luego, cuando se fue por lo más literario, y desde luego, más adelante, cuando se ha ido por donde se ha ido, ha perdido el norte.
En el repaso de estos días he echado en falta «El bosque animado».
Una preguntica… A ver, es que al ver el Crack 1 me quedé dormido cuando Germán Areta viaja a E.E.U.U. -y no culpo a la peli, ojo, si no a los de la tele que no piensan en que hay gente que madruga- …yo quisiera saber que diablos es el famoso «crack». Gracias, Alfredo.
Anda que… Tienes toda la razón en cuanto a los programadores. Entre semana, especialmente, es algo digno de que los procesen por tortura. Especialmente esos canales -ese canal- que por costumbre corta para publicidad cuando le quedan cinco o diez minutos a la película y meten quince o veinte extras de anuncios… En fin.
«El crack» es un título que no hace referencia a nada en concreto. O a todo. Quiero decir que, como buen cronista de su momento histórico -su cine de aquellos años, más allá de la forma que adopte, es sobre todo eso, una crónica sociológica de su tiempo-, el título no se refiere a nada en particular de la trama, sino al ambiente general en que transcurre la acción. Así, Garci juega con la ambivalencia USA-España de entonces. Si en una ciudad como Nueva York, a principios de los ochenta el crack -la droga así llamada- hacía furor entre los jóvenes (y se llevaba cientos de vidas), en España vivíamos un «crack» político y social, un momento de ruptura que muchos interpretaban como la apertura para la aceptación o la búsqueda del «American way of life», crack incluido. Es decir, que el título viene más por su acepción genérica en inglés que porque tenga un sentido concreto en la historia. No hay traficantes de crack ni el crack mata a nadie ni nada de eso.
Aclarado, espero…
Muchas gracias. Aclarado perfectamente. Así pues, ahora también estamos en otro «crack»: el del estado del bienestar… o sea que la historia es un salto de crack en crack…alguna peli quedará para la historia que retrate esta ruptura ¿no? Ahora, aunque tú te lo tomes a guasa y me asesines con el pensamiento, me viene a la cabeza esa de hace dos o tres años que protagonizaba tu «adorado» Fernando Tejero, esa en la que interpretaba a un hipotecado que acaba secuestrando al constructor. En su nivel, acaso de andar por casa, a mí me gustó, oye.
Bueno, el primer «crack» fue el del 29… Es un aspecto que no ha sido, creo yo, suficientemente tratado por los medios de comunicación: cómo la crisis financiera de 1907-09 en América provocó una desregulación legal que favoreció la crisis del 29, y cómo estos distintos episodios han ido cristalizando en las hipotecas-basura y en nuestra crisis de hoy.
Date por asesinado (con el pensamiento, ojo…).
Mira, hay una buena colección de películas que reflexionan sobre el sistema, desde «Wall Street» (la buena, la primera) hasta la francesa «Recursos humanos», pero, por ceñirnos a una española, una que me encanta es «Concursante», de Rodrigo Cortés.
Perdón por la intromisión aquí pero quería aclarar que la peli a la que aludí más arriba como un ejemplo que trata uno de los «cracks» sociales del momento (el de la burbuja inmobiliaria, los «cracks» personales y económicos que afectan a los españolitos del momento, etc) se titula -no lo recordaba en ese momento- «Cinco metros cuadrados» y es de 2011. (Es que casualmente la estrenaron ayer en Versión Española…)
Sí, sí, si la tenía localizada. Es un intento «actualizado» de volver a las antiguas películas de Berlanga, Marco Ferreri, Azcona… Tipo «El pisito» o «El cochecito». Intento fallido a medias. He de confesar que la dupla Tejero-Alterio, por más que se insistiera en su comunión para darle salida a la película, no me hace ninguna gracia.
39escalones 
Adiós CRACK nos he hecho disfrutar en infinidad de películas. Me encanta la foto elegida en su despedida…El Crack que sigue viéndose con la nostalgia de los días pasados.
Para mí, tenía que ser esta foto, porque para mí Landa es, ante todo, Germán Areta. La metamorfosis de Landa entonces es, de alguna manera, la del país en aquel tiempo (aunque estos días se demuestre que no hemos pasado de oruga a crisálida, sino de gusano a gusano con alas que no vuelan).
Gracias, José María.
Bueno,otro más que se fue.Uno de los muchos actores que tuvieron que trabajar en los años del franquismo para comer y realizando horteradas a más
no poder. Garci supo sacarle buen provecho en la serie del Crak. Lo que me pasa a mí con este actor es que cuando lo veía en interpretaciones serias,como por ejemplo,Historias de un beso,no es muy creíble:como camina,su seriedad como escritor de renombre;no fue un José Luis López Vázquez,también pequeño,calvo y todo eso,pero mejor actor.No puedo imaginarme a Landa interpretando La prima Angélica o La cabina,¿no crees? No le veía como a un Fernando Delgado,Agustín González,Rafael Alonso,Manolito Alexandre,etc., no sé. De todas las maneras se nos fue uno de la familia.Digo de la familia para todos
a aquellos que crecimos con el cine español,con caspa o sin ella.
Un abrazo.
Uf, Paco, no estoy muy seguro de estar de acuerdo contigo. Te entiendo, su cambio no fue tan radical ni tan completo como los casos que citas, seguro. Los resquicios del pasado permanecieron más ligados a él que a cualquier otro actor de su generación, de entre los «tuneados» a los nuevos tiempos. Pero yo creo que es más culpa por las películas de Garci en las que sale ya mayor (la que citas o «Luz de domingo») que por él; de hecho, en una de ellas que a ti a mí nos encanta «Tiovivo c.1950», Landa está que se sale en la escena del teléfono. Pero, es verdad, de todos aquellos, en comparación, es el que más tiempo estuvo desaparecido, y si no hubiera sido por Garci, seguramente no habría habido metamorfosis de ningún tipo.
Abrazos
Yo no le pongo matices como hace Paco. Hoy se ha ido un grande, grande, grande,… a pesar de su corta estatura.
Descanse en paz.
Yo entiendo sus matices, pero también veo su Sancho Panza, por ejemplo, su Germán Areta, y no veo a «Manolo la Nuit» en ellos. Afortunadamente.
En fin, qué pocos quedan… Lo peor de todo es que ya hay generaciones enteras que no saben quién es este señor, ni los de su época. La tragedia de este país siempre es el olvido.
Esto es increíble. Como decía aquella canción de Nacha Pop “una décima de segundo”. Vengo de ver a un colega, que ha tenido un pequeño accidente. Sin el móvil inteligente, ni conexión con el mundo exterior. Andando de vuelta a casa entre el zumbido de sirenas y el retorno de la gente en sus coches tras la jornada laboral. Entro en el blog y veo los enlaces. Perdona la expresión, Alfredo. Pero, ¡me cagüen la puta se ha muerto un pedazo de actor! D.E.P, abrazos
Así es. En fin, la Parca no avisa ni hace huelga.
Un abrazo.
Uno de los grandes, sin dudas. D. E. P.
Pues fíjate que hasta ahora no recuerdo el personaje de Paco el bajo de «Los santos inocentes». Sólo por ese papel debo rectificar todo lo que he dicho antes en cuanto al reciclaje de Landa tras la era del desarrollismo. Y rectifico con mucho gusto.
De verdad que no es por llevar la contraria a Paco, faltaría más que un grumete se subiera a las barbas del patrón, pero es que en el caso de Landa, (otro Don Alfredo) no soy capaz de encontrarle un pero que lo haga inferior, ni en detalles, a cualquier otro de los mejores (esos en los que los tres estamos pensando) mejores actores patrios de todos los tiempos. Lo intento, por aquello de la relatividad, pero no lo consigo,
En cuanto a la interpretación de «Paco el bajo» es, en sí misma, una obra de arte mayúscula.
¡Como duele esto! Si sólo tenía 80 años, aunque para mí ya había muerto hace 5 años, en los que no sabía nada de él.
Precisamente el otro día, con la reposición de La Vaquilla, lo comentaba con mi madre ¿Cómo estará este hombre?
Ayer, Antena Aragón repuso una conversación que mantuvo con el bueno de Luis Alegre en 2008 en el gran programa «El reservado». Al principio, mientras contaba su vida, me pareció que sobreactuaba un poco casi como si estuviera declamando pero aún así, la bonhomía y franqueza que inspira y el hecho de que usara diminutivos como «puertica» o «papelico» consiguieron que dejara el retrato que yo esperaba de él. Fue una conversación muy amena y emocionante.
Se sabía que estaba muy flojo después de un ictus, y que además, en las conversaciones, a menudo se le iba la cabeza. Recientemente, hará un año o así, escuché un programa de radio que fueron a hacer a su casa algunos de sus amigos (Garci entre ellos); allí todavía estaba lúcido y distendido, Pero el deterioro ha debido ser bastante rápido. En fin, me gusta que resaltes eso de que era un gran conversador, porque, por lo que parece, era verdad. Claro, siempre y cuando no le tocaran aquello…
Yo lo entiendo de esta manera, Raúl: mientras Fernán-Gómez, Aleixandre, López Vázquez, González, Sacristán, etc., dieron el paso del cine franquista, digamos «frívolo» (con todos sus matices y excepciones), al cine «serio» (ídem) para quedarse como actores de referencia en el cine español de mejor calidad y mayor trascendencia (desde el segundo tercio de los setenta hasta entrados los noventa), en el caso de Landa se da más una convivencia que un cambio. Porque, sí, están Areta, Paco el bajo, Fendetestas, «Canción de cuna» y las demás de Garci, pero está también el brigada de «La vaquilla», «Biba la banda», «Al fin solos» y sus series de televisión. Y ahí no dejaba de ser el Landa de toda la vida. Esa, al parecer de Paco, creo, y en parte, del mío, porque en parte lo comprendo, es la diferencia. Es una tontería, porque eso habla de su versatilidad. Y también, la verdad, importa poco vista la admiración que despertó en Cannes en 1984 en un jurado que no le conocía y que se quedó absolutamente atónito con su personaje.
Para mi, como para muchos, un Grande del cine español. Si me apenó la muerte de José Luis López Vázquez o Tony Leblanc, la de Alfredo Landa la he sentido más. Era un símbolo. Descansa en paz, Germán.
Un saludo.
Un referente, amigo Quevedillo, sín duda. De los tres que citas, personalmente no he simpatizado nunca, en lo humorístico, con Leblanc.
Saludos.
Lo mío ha sido una opinión.Pero vuelvo para dejar constancia del aprecio que le tengo a Alfredo Landa.Aquí va un poema compuesto a base de los títulos de las películas que he visto y en orden cronológico.Este poema también se lo dedico a Raúl. Él y yo tenemos un espacio secreto que es como un cementerio de los grandes ilustres españoles.
Atracó a las tres
y se fue a la verbena de la Palona
y se dijo:Se vive una sola ve.
y las niñas se pusieron de luto;
él casi un caballero.
Luego llegaron los marcianos
con nobleza baturra:
Historias de la televisión,
whisky y vodka
como un señor de Murcia.
Ay,la ciudad no era para él,
hoy como ayer,
de nuevo en esta plaza,
de cuerpo presente y
amor a la española,
las cicatrices.
Landa,Landa,Landa,
un diablo bajo la almohada y somos de piedra:
La dinamita está servida:
una vez al año ser hippy no hace daño,qué carajo,
cateto a babor y un
guapo heredero busca esposa y
un pisito de solteras.
El reprimido;dormir y ligar todo es empezar,
fin de semana al desnudo y
mayordomo para todo y las verdes praderas
préstame a tu mujer, hijo que es
forja de amigos y me mete un crack
en la próxima estación. Se mete otra parte de crack,
y piernas cruzadas
y hay más santos inocentes y paraísos perdidos
Sinatra y el río que nos lleva. Aquí el que no corre
vuela.Menuda marrana,menuda vaquilla de la vida.
Landa,Landa,Landa
por fin solos.Historia de un beso.
El refugio del mal y la luz prodigiosa
y el oro de Moscú.Bandera negra.
La vida es un tiovivo una luz de domingo.
Subámos todos al Arca de Noé que esto se hunde.
Landa,Landa,ven a tripular con la bandera negra esta
barca aunque seas un cateto a babor.
Un fuerte abrazo para ambos
Joer, qué bien traído todo… Me ha encantado «Una vez al año ser hippy no hace daño»… Memorable.
Abrazos
¡Excelente!
Impresionante la vis lírica de Francisco.
Respecto a lo de si Alfredo Landa era un gran conversador, a mí me lo pareció aunque claro, Luis Alegre no le «tocó aquéllo» que dices. Aunque hubo un momento, cuando salió a relucir el deterioro de la relación con Garci que yo me dije «¡Ay, ay, que esto explota». Para nada. Aunque evidentemente todo está preparado me sorprendió que se tocara ese tema delicado.
Cuando has dicho que hará un año, un grupo de amigos, Garci entre ellos se reunió en su casa, de verdad que me he alegrado porque eso demuestra que las relaciones se arreglaron, lo cual era muy importante para Landa que decía que la amistad era fundamental en su vida.
Pues fue tal cual; en realidad querían invitarle al programa, pero como no podía salir ya de casa, fueron a grabarlo allí a una hora más normalita. Fue emocionante, aunque, por otro lado, un poco triste.
Me ha decepcionado un poco El Crack 2 en cuanto a la acción porque me quedé con ganas de una gran venganza por parte de Germán Areta y porque respecto a la 1ª parte baja en tensión. Por lo demás ¡fantástica! Hasta Arturo Fernández me gustó, y mira que me parece histriónico siempre que lo he visto! Por otro lado, aunque sólo sea por nostalgia de mi niñez, me gustan esas vistas de la ciudad tanto en la parte 1 como en la 2, pero yo creo que Garci abusa un bastante de ellas.
Está siendo completísimo el repaso que las teles están haciendo de toda la trayectoria de tu tocayo Landa. Se lo merece, sin duda y ¿sabes qué? ¡Que aún no puedo creerme que haya muerto!
Claro, es que es Germán Areta, no Harry Callahan… Entiendo lo que dices, es más contemplativa y reposada.
Madrid es a menudo, en las peliculas de Garci de aquella época, un personaje más, y contribuye, para mí, a que su cine de aquellos años siga siendo el mejor que ha hecho. Estaba pegado sociológicamente a la calle, al momento que vivía el país, y en eso la presencia de Madrid en la pantalla ayuda muchísimo. Luego, cuando se fue por lo más literario, y desde luego, más adelante, cuando se ha ido por donde se ha ido, ha perdido el norte.
En el repaso de estos días he echado en falta «El bosque animado».
Una preguntica… A ver, es que al ver el Crack 1 me quedé dormido cuando Germán Areta viaja a E.E.U.U. -y no culpo a la peli, ojo, si no a los de la tele que no piensan en que hay gente que madruga- …yo quisiera saber que diablos es el famoso «crack». Gracias, Alfredo.
Anda que… Tienes toda la razón en cuanto a los programadores. Entre semana, especialmente, es algo digno de que los procesen por tortura. Especialmente esos canales -ese canal- que por costumbre corta para publicidad cuando le quedan cinco o diez minutos a la película y meten quince o veinte extras de anuncios… En fin.
«El crack» es un título que no hace referencia a nada en concreto. O a todo. Quiero decir que, como buen cronista de su momento histórico -su cine de aquellos años, más allá de la forma que adopte, es sobre todo eso, una crónica sociológica de su tiempo-, el título no se refiere a nada en particular de la trama, sino al ambiente general en que transcurre la acción. Así, Garci juega con la ambivalencia USA-España de entonces. Si en una ciudad como Nueva York, a principios de los ochenta el crack -la droga así llamada- hacía furor entre los jóvenes (y se llevaba cientos de vidas), en España vivíamos un «crack» político y social, un momento de ruptura que muchos interpretaban como la apertura para la aceptación o la búsqueda del «American way of life», crack incluido. Es decir, que el título viene más por su acepción genérica en inglés que porque tenga un sentido concreto en la historia. No hay traficantes de crack ni el crack mata a nadie ni nada de eso.
Aclarado, espero…
Muchas gracias. Aclarado perfectamente. Así pues, ahora también estamos en otro «crack»: el del estado del bienestar… o sea que la historia es un salto de crack en crack…alguna peli quedará para la historia que retrate esta ruptura ¿no? Ahora, aunque tú te lo tomes a guasa y me asesines con el pensamiento, me viene a la cabeza esa de hace dos o tres años que protagonizaba tu «adorado» Fernando Tejero, esa en la que interpretaba a un hipotecado que acaba secuestrando al constructor. En su nivel, acaso de andar por casa, a mí me gustó, oye.
Bueno, el primer «crack» fue el del 29… Es un aspecto que no ha sido, creo yo, suficientemente tratado por los medios de comunicación: cómo la crisis financiera de 1907-09 en América provocó una desregulación legal que favoreció la crisis del 29, y cómo estos distintos episodios han ido cristalizando en las hipotecas-basura y en nuestra crisis de hoy.
Date por asesinado (con el pensamiento, ojo…).
Mira, hay una buena colección de películas que reflexionan sobre el sistema, desde «Wall Street» (la buena, la primera) hasta la francesa «Recursos humanos», pero, por ceñirnos a una española, una que me encanta es «Concursante», de Rodrigo Cortés.
Perdón por la intromisión aquí pero quería aclarar que la peli a la que aludí más arriba como un ejemplo que trata uno de los «cracks» sociales del momento (el de la burbuja inmobiliaria, los «cracks» personales y económicos que afectan a los españolitos del momento, etc) se titula -no lo recordaba en ese momento- «Cinco metros cuadrados» y es de 2011. (Es que casualmente la estrenaron ayer en Versión Española…)
Sí, sí, si la tenía localizada. Es un intento «actualizado» de volver a las antiguas películas de Berlanga, Marco Ferreri, Azcona… Tipo «El pisito» o «El cochecito». Intento fallido a medias. He de confesar que la dupla Tejero-Alterio, por más que se insistiera en su comunión para darle salida a la película, no me hace ninguna gracia.