«La óptica de Buñuel, incluso cuando rueda una historia dura, sigue siendo la del humor negro. Buñuel bromea a propósito, es socarrón y ríe a menudo. Gracias a su presencia se divierte uno mucho en el plató. Es evidente que en el personaje de Don Lope, magníficamente interpretado por Fernando Rey, ha intentado una síntesis de todos los hombres que ha retratado en sus películas, desde Archibaldo de la Cruz hasta Viridiana, mediante la acumulación de una masa de detalles crueles, extraños y con frecuencia íntimos […]. Buñuel es, en primer lugar, un formidable narrador de historias, un guionista diabólico que mejora sin cesar el texto para que la anécdota sea más interesante, más sugestiva. Luis Buñuel dice a veces que no piensa en el público y que hace películas para los amigos. Pero creo que lo que pasa es que considera a sus amigos como especadores difíciles y exigentes. Por eso trabaja tanto para cautivarles y de esta manera logra hacerse comprender, admirar y amar por los cinéfilos del mundo entero».
Catherine Deneuve en Trabajando con Buñuel (1970).
ja,ja,ja ¡La foto última del porrón es genial! ah, qué tiempos en los que la intelectualidad no estaba reñida con el costumbrismo popular más auténtico de hondas raíces etnográficas…¡Toma ya! ja,ja,ja
Bueno, la intelectualidad, si es que eso existe, sigue sin estar reñida con eso. Es la pose intelectual la que tiene un problema con lo popular…
Je je je. Carlos tiene toda la razón. Y en cuanto a la primera fotografía, ésta parece sacada de una película expresionista. Una maravilla.
En la declaración de Deneuve hay un detalle que me gusta muchísimo, aquello de que «hace películas para los amigos». Si esto (de ser un índice tomado del modo más serio, o sea sin olvidar nunca el valor comunicativo del cine) se aplicara hoy y siempre, cuánto cambiarían – me gustaría pensar que para bien – las cosas.
Besos.
Sin duda, Miriam. Hay una anécdota sobre el regreso a Calanda de Buñuel y la proyección de una de sus películas para la gente del pueblo. Un antiguo amigo de la familia se le acerca una vez terminada la proyección y, cuando Buñuel le pregunta qué le ha parecido la película, este le espeta: «flojica, Luisico, flojica». Entiendo la referencia a la amistad por la complicidad; creo que Buñuel no solo hace películas para los amigos, sino para los amigos cómplices; o bien, sensu contrario, que termina considerando «amigos» a sus espectadores cómplices. Más que amigos, iniciados.
Besos
Oye, pues me acaba de salir la vena frívola, pero en la foto del porrón, Buñuel está bien atractivo. Guapetón, guapetón…
Beso
Hildy
Jajajaja. El zumo, eso es el zumo…
Besos