Música para una banda sonora vital: La casa Gucci (House of Gucci, Ridley Scott, 2021)

Todo es un desastre en este nuevo bodrio de Ridley Scott sobre la familia Gucci y la sucesión de traiciones, luchas de poder y venganzas que llevaron sus negocios a la decadencia y desencadenaron en el asesinato en 1995 de Maurizio Gucci (Adam Driver) por orden de su mujer, Patrizia Reggiani (Lady Gaga). Película tan superficial, tan pobre, que solo sabe lucir dinero y fabricar videoclips insertando canciones pop del repertorio popular de tres décadas que cubre, de los 70 a los 90, con Jeremy Irons y Al Pacino completando reparto como caricaturas de sí mismos, los únicos momentos reseñables son aquellos que corresponden a su registro como comedia involuntaria, con Salma Hayek como pitonisa televisiva y Jared Leto dando vida a Paolo Gucci como si acabara de escaparse de La hora chanante o de Al Ataque, aquel programa del nefasto Alfonso Arús.

Como colofón de la película, otra rareza, una de esas versiones de canciones pop que le dio por hacer a Luciano Pavarotti a dúo con sus autores o intérpretes, en este caso, junto a Tracy Chapman en su tema Baby Can I Hold You Tonight. Muy adecuada para una película de excesiva duración (más de dos horas y media) hecha a trozos, si no a mordiscos.

Música para una banda sonora vital: Infiltrado en el KKKlan (BlacKkKlansman, Spike Lee, 2018)

Entre la comedia negra (no es un chiste) y la denuncia, en no pocas ocasiones superando la fina línea del panfleto, esta película de Spike Lee cuenta con la dirección artística y la ambientación musical como su mejor baza en un conjunto irregular que alterna momentos interesantes y baches narrativos y de tono, además de, como es habitual en el director, alguna que otra zambullida sobrante en la propaganda más burda.

Entre los aciertos musicales destaca el empleo de canciones cuya colocación en la trama, al hilo de su letra, contextualizan, completan o rubrican el momento dramático del argumento, como ocurre con este Too Late to Turn Back Now de Cornelius Brothers and Sister Rose, que subraya el instante en que el protagonista, policía de raza negra (John David Washington), se infiltra entre las organizaciones que demandan la igualdad racial en Colorado Springs en los años setenta, y, prácticamente al mismo tiempo, se enamora de una de las activistas más comprometidas (Laura Harrier).

Música para una banda sonora vital: La suerte de los Logan (Logan Lucky, Steven Soderbergh, 2017)

Take Me Home, Country Roads, clásico del malogrado John Denver (fallecido a los 53 años en un accidente aeronáutico cuando pilotaba una aeronave experimental), es el motivo musical de esta intrascendente comedia de robos dirigida por Steven Soderbergh, prematuro «nuevo genio» del cine en cuya carrera se alternan las películas interesantes con las naderías intrascendentes.

Música para una banda sonora vital: Frances Ha (Noah Baumbach, 2012)

Frances Ha es una de esas películas que al primer vistazo se toman como una comedia fresca, auténtica, encantadora y deliciosamente caótica, y que al segundo visionado se revela como lo que es, una inmensa estupidez apenas camuflada bajo el marchamo formal y estético de esa gran trola llamada «indie». Su protagonista, Greta Gerwig, parece no haber asimilado el paso de los años, y en 2017 ha vuelto a la carga en idénticos parámetros con la boba e insufrible Lady Bird, nominada al Óscar a la mejor película. Cosas veredes.

Al menos Frances Ha cuenta como uno de sus leitmotivs con Modern Love, de David Bowie. Algo es algo.

 

 

Música para una banda sonora vital: A propósito de Llewyn Davis (Inside Llewyn Davis, Joel Coen y Ethan Coen, 2013)

Justin Timberlake, Oscar Isaac y Adam Driver interpretan Mr. Kennedy, canción tirando a ridícula que ilustra el espinoso tema del músico que debe participar en la grabación de auténticas porquerías para sobrevivir económicamente, en esta emotiva película sobre los circuitos de música folk del Nueva York de 1961. Melancólica, agridulce y amarga, de altibajos emocionales constantes, también está poblada por esos secundarios chiflados y excéntricos tan queridos por los hermanos Coen.

Diálogos de celuloide: Paterson (Jim Jarmusch, 2016)

Resultado de imagen de paterson 2016

«Tenemos un montón de fósforos en nuestra casa.
Los tenemos a mano, siempre.
Actualmente, nuestra marca favorita es «Ohio Cabeza Azul»,
aunque solíamos preferir la marca «Diamante».
Eso fue antes de descubrir «Ohio Cabeza Azul.»
Ellos están muy bien empaquetados, robustas cajas pequeñas
con azul oscuro y claro, y la marca escrita en blanco,
con letras escritas en la forma de un megáfono,
como si quisiera decirle más duro al mundo,
«Aquí está el fósforo más bello del mundo,
de una pulgada y media de suave vástago de pino
cubierto por una granulada cabeza púrpura oscuro,
muy sobrio y furioso,
y obstinadamente listo para explotar en fuego
prendiendo, quizás, el cigarrillo de la mujer que amas,
por primera vez,
y nunca fue lo mismo después.
Todo eso te daremos».
Eso fue lo que me diste: yo me convertí
en cigarrillo, y tú en fósforo,
o yo en fósforo, y tú en cigarrillo,
brillando con besos ardiendo hacia el cielo.»

Paterson (Jim Jarmusch, 2016). Poemas de Ron Padgett.